Las elecciones en EU están marcadas por la pandemia de COVID-19, el voto por correo y las manifestaciones por parte de demócratas y republicanos
Sin duda, las elecciones del 3 de noviembre en Estados Unidos (EU) han sido definidas como históricas, pues se dan en un contexto marcado por la pandemia de COVID-19, un alto número de casos, pero también por el uso del voto por correo para reducir los contagios y el llamado de los candidatos a votar.
Con medidas de distanciamiento social, urnas separadas y el uso de cubrebocas en todo momento, los centros de votación se prepararon para recibir a miles de personas que buscaron ejercer su voto, ya sea para darle cuatro años más a Donald Trump en el gobierno o para cambiar y elegir a Joe Biden.
Además, uno de los protagonistas de estas elecciones fue el voto por correo con el fin de evitar posibles contagios de COVID-19 en las elecciones. En meses previos, Trump manifestó que esta vía para votar podría traer graves consecuencias como un posible fraude y fue algo que repitió constantemente en su campaña. No obstante, tanto el FBI como la Comisión Electoral Federal aseguraron que no hay pruebas para pensar que habría un gran fraude por parte del Servicio Postal estadounidense.
Por otro lado, el New York Times señaló que a pesar de la pandemia, las elecciones lograron convocar al 67% del electorado, el porcentaje más alto que se tiene registrado desde hace un siglo. Desde la comunidad latina hasta la afroamericana y los que por primera vez ejercían su voto, la convocatoria fue positiva.
Un país polarizado
Sin embargo, la incertidumbre por el resultado de las elecciones, la insistencia por parte de Trump sobre un supuesto fraude y el descontento de una gran parte de la población por las desigualdades sociales, han provocado que tanto seguidores demócratas como republicanos salieran a la calle a respaldar a sus respectivos candidatos.
Por un lado, están los seguidores de Trump quienes repiten las palabras del presidente como “elecciones amañadas”, “fraude” y “paren el conteo” y reafirman su compromiso con el presidente. De acuerdo con el mapa electoral de la agencia de noticias AP, hasta el momento el partido republicano lleva un total de 69 millones 812 mil votos; es decir 47.8% de los votos contados. Lo anterior muestra que miles de personas están de acuerdo con otros cuatro años más a cargo de Trump.
Por el otro lado están los seguidores demócratas de Biden, quienes al igual que el candidato, piden que se cuenten todos los votos. El mismo mapa de AP, muestra una ligera delantera por parte del exvicepresidente con un total de 73 mil 765 millones de votos, es decir 50.5% de los votos contados hasta el cierre de esta edición. Con las consignas de “Trump y Pence fuera ya”; “cuenten cada voto”; y “eviten que Trump robe la elección”, cientos salieron a las calles para alzar la voz.
¿Qué depara el futuro?
Si bien aún no se tiene una confirmación sobre quién es el ganador de estas elecciones, medios internacionales proyectan un escenario complicado. Si Biden gana, es posible que Trump pida una resolución por parte de la Corte Suprema; que recientemente obtuvo la mayoría republicana con el nombramiento de Amy Coney Barrett y se niegue a dejar el poder. Pero, si Trump gana, reforzaría su discurso en contra de los medios de comunicación; el cambio climático; y el apoyo a grupos supremacistas blancos.
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Publicado por Energía Hoy en Viernes, 6 de noviembre de 2020
En cualquiera de los dos escenarios, se espera una clara acentuación de la polarización del país; pues aproximadamente 50% apoya a Biden y el otro 50% a Trump.
*Fotografías de Agence France-Presse (AFP).
