El secretario General de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), Haitham Al Ghais, aseguró que la demanda de crudo para 2045 aumentará un 23% hasta 2045, al considerar el uso de “todas las fuentes de energía disponibles”, durante su participación en la conferencia Energy Asia, en Kuala Lumpur, Malasia.
Diferentes analistas han monitoreado el camino que tomará el petróleo. De ahí que Rystad Energy señaló que la demanda del oro negro incrementará hasta 2 millones de barriles diarios a lo largo de 2023. O bien, la Agencia Internacional de Energía (AIE) manifestó que para 2028, la demanda de energía aumentará 6%, es decir, 105.7 millones de barriles por día.
“Cada pronóstico basado en datos que he visto muestra que el petróleo es insustituible en el futuro previsible. En nuestro WOO (World Oil Outlook), vemos que la demanda mundial de petróleo aumentará a 110 millones de barriles por día para 2045. Y el petróleo seguirá representando alrededor del 29% de la combinación energética para entonces”, dijo el secretario General de la OPEP a pesar de los análisis de expertos.
Asimismo, destacó, la demanda de crudo para 2045, sólo para la industria petrolera, implicará los requisitos de inversión equivalentes a 12.1 billones de dólares, “o más de 500 mil millones de dólares cada año desde ahora hasta 2045”.
Cero emisiones y necesidad de energía no encajan
Para el secretario General, no concuerdan los llamados recientes acerca de garantizar un suministro estable y global de energía; en tanto a la par se exige poner fin a la financiación de proyectos petroleros. “Las dos oraciones simplemente no encajan”, dijo.
En ese sentido, recalcó, “hablar de ninguna nueva inversión en proyectos petroleros sólo conducirá al caos energético. Necesitamos claridad energética, no caos energético. También necesitamos hechos, no fantasías, para llevarnos a través de una transición justa, inclusiva y realista”.
Claridad energética
De acuerdo con Haitham Al Ghais, en los últimos años se ha hablado de objetivos de cero emisiones, donde la demanda global cae a alrededor de 80 millones de barriles diarios para 2030. Lo cual equivale a más de 20 millones de barriles diarios por debajo del nivel actual. “Sin embargo, durante el período hasta 2030, se espera que otros 500 millones de personas se muden a ciudades de todo el mundo a medida que la economía global continúa expandiéndose“.
Dicho incremento poblacional en la ciudades implica “que el mundo necesitará más, no menos petróleo, junto con la necesidad de reducir continuamente las emisiones”. Añadió que “las referencias a números netos cero han sembrado confusión entre inversores y legisladores”.
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