La Canirac sugiere que 8 de cada 10 restaurantes cerrarán de manera definitiva al finalizar el año; dadas las restricciones de la contingencia
La Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), anunció vía un comunicado que se estima el cierre de 122 mil restaurantes al final de año; debido a la pandemia de COVID-19 que derivó en la crisis económica para muchos establecimientos en el país. En tanto, las pérdidas de empleos directos previstas en esta industria, rondan por el orden de 450 mil.
De acuerdo con una encuesta elaborada por la misma Canirac, 8 de cada 10 restaurantes cerrarían permanentemente en las siguientes semanas. En este sentido, el organismo afirma que la entrada del semáforo epidemiológico rojo en el Valle de México, que se implementó sin alertar con antelación al sector restaurantero; acelera el quiebre de los negocios.
“Se está condenando a miles de trabajadores al desempleo y a los restaurantes a la quiebra. La industria restaurantera lamenta y ve con profunda preocupación el nuevo cierre de actividades del sector en el Valle de México… Esto provocará una crisis irreversible, impactando la economía de miles de familias”, se señala en el comunicado.
Dado que muchos centros de consumo no podrán desplazar o concluir sus inventarios; lo que se traducirá en millones de pesos en pérdidas, porque la modalidad de entrega a domicilio no alcanzará a distribuir todos los productos perecederos en tiempo.
Al cierre de noviembre del presente, en México se tiene registro de más de 90 mil restaurantes cerrados; en la capital del país y en su zona metropolitana, 13 mil 500. A causa de las medidas de contingencia que se implementan para evitar la propagación del virus.
Por tal motivo, la propia Canirac exhortó al gobierno a realizar las declaratoria sanitaria en conformidad con las leyes; para contar con el marco jurídico que posibilite convenios, apoyos fiscales, en pro de reactivar el 11 de enero toda actividad relacionada.
“La industria, a pesar de manifestar su compromiso con el país, está sobreviviendo por su propia cuenta, donde los más afectados son los trabajadores y los proveedores locales que forman parte de la cadena productiva”, detalló la Canirac en el comunicado.
Por otra parte, el organismo expresó que las propias autoridades argumentan el alza en los contagios en las reuniones y fiestas privadas. Por lo que, este nuevo cierre alienta el incremento de estas reuniones; además de la venta informal de comida.
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