Cada vez se hace más urgente la descarbonización en manufactura, pues este sector representaría el 85% del nearshoring en México, según información de Trane, empresa líder en la industria de aire acondicionado, calefacción y ventilación
Particularmente a empresas del programa de la Industria Manufacturera, Maquiladora y de Servicios de Exportación (IMMEX), según el Consejo Nacional de la Industria Maquiladora y Manufacturera de Exportación. No obstante, solo el 55% de las empresas en el país considera la sustentabilidad como una parte integral de su estrategia de negocios, así detalla un estudio de SAP.
De acuerdo con Carlos García, Director General de Trane México, “el mundo ha entrado en una era en la que los países y las empresas, que buscan liderar la economía, están haciendo una transición a cero emisiones netas. Por ello, es de esperarse que las empresas que buscan trasladarse a México, demanden una infraestructura de energía limpia y proveedores sustentables que les ayuden a priorizar los estándares ambientales”.
Para impulsar la descarbonización en manufactura, es importante la introducción rápida y a gran escala de medidas de eficiencia energética. En este sentido, es imperativa la adopción de tecnologías, como las soluciones de calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC), y prácticas empresariales sustentables que contribuyan a mitigar el impacto ambiental y generen ahorros significativos a largo plazo.
Utilizar soluciones HVAC que integren energías renovables
Las soluciones HVAC poseen una capacidad fundamental para integrarse con fuentes de energía renovable, como la solar y la eólica. Esta sinergia ofrece una vía hacia operaciones más ecoeficientes al reducir la dependencia de fuentes tradicionales y contaminantes.
Por ejemplo, la integración de soluciones HVAC con paneles solares permite aprovechar la energía solar para alimentar estos equipos, reduciendo la huella de carbono asociada con la climatización de edificaciones. “Esta convergencia entre tecnologías de climatización y energías renovables contribuye a reducir la huella de carbono, impulsar la eficiencia energética y a minimizar los costos en las empresas de la industria manufacturera”, agregó el ejecutivo de Trane.
Actualizar a enfriamiento y calefacción de precisión
Los procesos de manufactura tienen especificaciones precisas de temperatura, humedad y calidad del aire. Los sistemas HVAC más nuevos y sofisticados representan un salto significativo en la eficiencia energética y la comodidad ambiental al ser diseñados con una precisión excepcional. Estas tecnologías de vanguardia permiten un control meticuloso de las temperaturas, suministrando la cantidad exacta de calefacción o enfriamiento de manera específica y oportuna.
Esta capacidad de respuesta precisa, gracias a la implementación de sensores inteligentes y sistemas de automatización avanzados, optimiza el consumo de energía al evitar excesos innecesarios, y mejora significativamente la eficiencia operativa, brindando entornos más cómodos y sustentables.
Reducir los gases de efecto invernadero
Esto debe contemplar todos los espacios, desde la sala de juntas hasta el piso de producción. “La innovación continua en sistemas HVAC energéticamente eficientes permite a las empresas de manufactura utilizar menos energía sin comprometer las condiciones ambientales o el confort requeridos”, indica Carlos García.
El punto de partida es adoptar soluciones HVAC eficientes que utilicen tecnologías menos contaminantes; además, se puede recurrir a sistemas de automatización de edificios que mejoran el rendimiento, la eficiencia y la comodidad de los ocupantes.
Emplear variadores de frecuencia (VFD)
Los VFD están marcando un avance significativo hacia la eficiencia energética, ya que permiten ajustar la velocidad de los motores según la demanda real de los sistemas HVAC, adaptándose dinámicamente a las condiciones cambiantes y evitando el funcionamiento constante a máxima potencia.
Su uso adecuado garantiza ahorros energéticos inmediatos, al reducir el consumo de electricidad, pero también contribuye a un ahorro financiero a largo plazo, al extender la vida útil de las soluciones de aire acondicionado y minimizar los costos de su mantenimiento.
Transición a refrigerantes respetuosos con el medio ambiente
La transición a refrigerantes ecológicos en soluciones HVAC es otra de las estrategias para reducir la huella de carbono. Los refrigerantes tradicionales han sido identificados como contribuyentes significativos al cambio climático. En respuesta, la industria HVAC está adoptando refrigerantes más amigables con el medio ambiente, como el R-454B, que ofrece una reducción del 70 por ciento en el impacto directo del PCA (potencial de calentamiento atmosférico), en comparación con otros, como el R-410A.
Al priorizar la utilización de refrigerantes ecológicos, las empresas pueden mejorar su responsabilidad medioambiental, y asegurar la eficiencia y la longevidad de sus sistemas HVAC, alineándose con las demandas de un mundo cada vez más centrado en la sustentabilidad.
Invertir en controles inteligentes
Los controles, sistemas y servicios de automatización de edificios actúan como el cerebro de un sistema HVAC, ofreciendo un nivel sin precedentes de control y automatización. Estos sistemas inteligentes regulan la temperatura de manera eficiente, y recopilan datos en tiempo real sobre el rendimiento del sistema, permitiendo una supervisión precisa.
La retroalimentación constante proporcionada por estos controles inteligentes permite realizar ajustes proactivos y un mantenimiento predictivo, lo que se traduce en un funcionamiento más confiable y una prolongada vida útil de los equipos. En última instancia, esta tecnología ofrece comodidad a los ocupantes e impulsa la eficiencia energética y sustentabilidad en cualquier edificio, incluyendo el piso de planta.
Centrarse en la recuperación del calor
La recuperación de calor representa una innovadora estrategia en el diseño de sistemas HVAC, ya que considera los equipos de un edificio como un único sistema integrado. En lugar de producir calor de manera independiente para calefacción, el sistema aprovecha eficientemente el calor residual generado durante los procesos de enfriamiento.
“Las soluciones de recuperación de calor están meticulosamente diseñadas para capturar el calor excedente y reintegrarlo dentro de las instalaciones, reduciendo así la necesidad de generar nueva energía térmica, lo que maximiza la eficiencia energética y contribuye a una gestión más sustentable de los recursos”, afirma Carlos García.
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