La planta de gas renovable, ubicada en Barcelona, está junto al vertedero de residuos Elena y ha representado una inversión de 2.2 millones de euros, señaló Naturgy
Naturgy se convirtió en la primera empresa en inyectar gas renovable procedente de vertedero en la red de distribución de gas de España, lo cual forma parte de su apuesta para impulsar la transición energética y abonar a la descarbonización del sistema energético.
🌿New landmark in Spain’s energy transition🌿
📣We are the first company to inject renewable landfill gas into Spain’s gas distribution network
📌https://t.co/r8AI8Gaq0g pic.twitter.com/vuvwDtR0Mx— Naturgy (@Naturgy) June 10, 2021
A través de un comunicado, la española indicó que la planta de gas renovable, ubicada en Parc de l’Alba de Cerdanyola del Vallés, en Barcelona, está junto al vertedero de residuos Elena y ha representado una inversión de 2.2 millones de euros.
Asimismo, la planta de Cerdanyola del Vallès producirá un total de 12 GWh/año de biometano; lo cual equivale al consumo anual de 3 mil 200 hogares. Además, evitará la emisión a la atmósfera de 2 mil 400 toneladas de Co2/año, una cantidad que equivale a plantar uno 5 mil árboles.
Del mismo modo, parte del gas que se inyectará a la red también se utilizará para suministrase como combustible a los vehículos en las estaciones del grupo Naturgy; pues es una alternativa viable para la movilidad sostenible.
“El biometano producido permitirá un aprovechamiento energético que contribuye a la economía circular; en línea con la Ley de Cambio Climático y con los objetivos del PNIEC”, aseguró Naturgy.
De acuerdo con el informe “Los gases renovables. Un vector energético emergente” de Fundación Naturgy, el potencial máximo de producción de gases renovables en España podría ser equivalente al 65% de la demanda total actual de gas natural si se impulsara decididamente su desarrollo.
En ese sentido, el estudio menciona que si España desarrolla todo su potencial de producción, este podría reducir uno 35 millones de toneladas de CO2; es decir, más del 10% de las emisiones de gases efecto invernadero para 2030.