Los problemas de abasto generados por la pandemia de COVID-19 aumentaron la demanda de plantas eléctricas de respaldo
La producción de plantas eléctricas de respaldo en México ha experimentado muy buenos resultados, debido a la calidad de los productos. Es por ello que su distribución se consolida en Centroamérica, el Caribe, Sudamérica; además de en el mercado más grande del mundo establecido en Estados Unidos.
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— Energía Hoy (@energiahoy) April 11, 2021
De acuerdo con especialistas, consultados por Forbes, el aumento de la demanda de plantas eléctricas se debe a los graves problemas generados por el COVID-19 en Sudamérica y por las fuertes tormentas que dejaron sin luz varios estados de Estados Unidos.
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Estos generadores se emplean en los entornos industriales, turísticos, comerciales, bancarios y de telecomunicaciones, ya que garantizan la permanencia operativa y ayudan a evitar riesgos.
Las plantas eléctricas son accionadas por medio de diferentes tipos de combustible; los más utilizados, por su eficiencia, son el gas natural y el diésel.
Crece exportación
La firma IGSA, cuyo mercado de exportación ha crecido paulatinamente a lo largo de estos últimos 15 años, en los cuales pasó de ser el 10% de la facturación de la división a casi un 40 por ciento.
De acuerdo con la empresa de plantas eléctricas de respaldo, su planta de producción ubicada en Lerma, Estado de México, donde laboran más de 150 personas, tiene la capacidad de producir 2,000 equipos al año.
Finalmente, a través del mercado de exportación, dijo la empresa, se venden más de 300 plantas eléctricas por año, en media y baja tensión, cubriendo proyectos con requerimientos desde 20 kW, hasta más de 2.5 MW de capacidad.
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