Las burbujas en los autos eléctricos son resultado del deseo de maximizar la utilidad ante acciones que crecen de precio sin detenerse
Ideas con brío
Santiago Barcón
Especialista en Código de Red
Si de algo sabemos los mexicanos que pasamos de los 55 años es de identificar una burbuja. La experiencia en carne propia de los años 76, 82 y 94 nos proporcionó un excelente olfato para detectarlas. Estamos ante una muy similar a la del internet, mejor conocida como .com
Las burbujas han existido y seguirán estando presentes porque son parte del capitalismo. El deseo de maximizar la utilidad ante acciones que crecen de precio sin detenerse resulta demasiado tentador. Es el mismo mecanismo que utilizan las pirámides. Adicionalmente, los inversionistas institucionales reciben bonos por el desempeño, lo que incentiva la decisión racional -para ellos- de apostar por los que no se detienen. Saben que en algún momento caerán, a eso se dedican, pero mientras dure la fiesta la aprovechan.
#Electricidad| Con las nuevas disposiciones para el abasto aislado, disminuirán las inversiones para esta clase de proyectos en torno a la generación eléctricahttps://t.co/f6ksk2eq2M
— Energía Hoy (@energiahoy) January 7, 2022
Los mexicanos sabemos que cuando podemos comprar en Estados Unidos (EU) como si fuéramos la reencarnación de Aristóteles Onassis, tarde o temprano tendremos una abrupta devaluación, aunque citen la frase celebre de López Portillo: “defenderé al peso como perro”.
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Recuerdo que cuando fui socio de una empresa española advertí que era inminente un colapso de los bienes inmuebles en España. La razón era sencilla: las propiedades en Bilbao costaban 30% más que en París. Aún así la respuesta fue: ¿y por qué tendrían que costar menos? No los culpo, Tokio llegó a valer más que todas las propiedades de EU y los japoneses lo veían como algo normal. Por 20 años no han logrado obtener un crecimiento económico aceptable.
Entrando en los autos eléctricos Tesla vale más que Toyota, Volkswagen, General Motors, Daimler, BMW, Honda, Kia, Hyundai y Stellantis combinadas. Pero esto es para abrir la boca, Rivian, que aún no ha facturado un solo dólar, en su oferta inicial alcanzó 100 mil millones de dólares (MMD) más que Ford, GM y Honda que facturan 400 MMD.
Vale la pena considerar que las acciones de Ford se han duplicado en lo que va del año y las de GM aumentado 50%. Es decir, no resulta ser una valuación alta basado en caída de los competidores, sino todo lo contrario.
Adicionemos que en la medida que entren nuevos competidores los márgenes caerán y con ello el valor de las acciones. ¿No se acuerdan de BlackBerry? o, más cercano a nuestro medio GE que pasó de ser la empresa más valiosa del mundo a salir del índice de Dow Jones.
Independientemente de cuestiones económicas me parece que los autos eléctricos necesitarán varias décadas, si acaso, para dominar el mercado. Mi razonamiento es meramente eléctrico. Cargar el auto en la noche, en casa, por seis horas para usarlo al día siguiente es una buena opción. Pero, ¿qué pasa si necesito recorrer más de 400 kilómetros?
Para ello requiero encontrar un cargador rápido que consume 150 KW por automóvil. Haciendo números, seis cargadores rápidos consumen lo mismo que un hotel cinco estrellas de 15 pisos.
En la carretera de México a Querétaro circulan diariamente, más de 110 mil autos. Suponiendo que solo un 25% requiera recargar, que es un número bajo, nos da unos mil 200 autos por hora pero sabemos que en el día esta cifra se superará con facilidad por los horarios de viaje. Tomemos 2 mil y tendremos que considerar cargar 115 autos cada tres minutos, pero esto no es realista, porque hay tiempos muertos de espera y factores de diversidad en la demanda. Aún así construir esta infraestructura requerirá de 25 MW en varias electrolineras donde el costo de llevar la energía a esta infraestructura no es asumible.
Consideremos que estamos hablando de la carretera con mayor circulación del país y cerca de centros de consumo; en otros lugares será aún más difícil por no decir que imposible. Tomemos en cuenta que la conveniencia se paga, muy pocos están dispuestos a esperar 10 minutos o a correr el riego de tener que hacerlo por horas.
Además, el beneficio en disminución de CO2 de los autos eléctricos depende de la mezcla de generación eléctrica. Por supuesto que los números varían, pero en general se requieren unos 75 mil kilómetros para que se empiecen a capitalizar los beneficios de la movilidad con baterías.
Y, aprovechando, en el futuro nos enfrentaremos con el reto de desecharlas sin causar daño al medio ambiente. Mucho más eficiente, para países en nuestro grado de desarrollo, es renovar en forma gradual la flotilla de autos.
Por supuesto, el auto eléctrico tendrá un crecimiento acelerado, pero no para las valuaciones que estamos presenciando, aunado a un posible despegue del hidrógeno. Al tiempo.
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