La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) otorgó el nombramiento a San Miguel durante el año 2008. Uno de los íconos más representativos de esta ciudad es la magnífica Parroquia de San Miguel Arcángel, con una fachada neogótica de finales del siglo XIX, que sin duda se ha convertido en el principal atractivo visual del destino.
San Miguel de Allende conmemoró los 14 años de su nombramiento como una ciudad Patrimonio de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
En 2008 el comité de expertos en Patrimonio Mundial, organismo internacional conformado por alrededor de 800 miembros, se reunió en Quebec, Canadá, para anunciar este nombramiento tan importante para San Miguel de Allende.
Fue desde el 07 de julio de hace 14 años que San Miguel de Allende quedó inscrito en la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO, dentro de la categoría de Bien Cultural y mediante el rubro de Ciudad Histórica.
Como un gran ejemplo de este nombramiento, destaca la impresionante arquitectura barroca generada en la época de la Nueva España a partir del siglo XVI, considerado de igual manera uno de los sitios más importantes y de mayor peso donde se forjó la Independencia de México.
Esta importante ciudad es un ejemplo de la gran conservación arquitectónica, manteniendo su autenticidad histórica, siendo uno de los motivos de su declaratoria como Patrimonio de la Humanidad.
Recordemos que San Miguel de Allende fue fundada en el siglo XV entre los indios purépechas y guamares como una misión. Asimismo es importante destacar que gran parte de sus edificios principales fueron construidos hasta el siglo XVII, siendo su época de mayor auge.
Alguno de los íconos más representativos de esta ciudad es la magnífica Parroquia de San Miguel Arcángel, con una fachada neogótica de finales del siglo XIX, que sin duda se ha convertido en el principal atractivo visual del destino.
San Miguel de Allende es un destino inmerso en tradiciones y cultura, que lleva a todos sus visitantes a un viaje lleno de historia, que sin duda alguna, deja grandes momentos y experiencias a quienes arriban a esta ciudad Patrimonio de la Humanidad, la cual hace latir el corazón de México y el mundo.
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