La metalúrgica Altos Hornos de México fue declarada en quiebra por un juzgado de la Ciudad de México. También se determinó que debe ser vendida, luego de años de crisis
La caída de la empresa comenzó en 2019 cuando fue detenido en 2019 Alonso Ancira el entonces presidente de la empresa. Esto a causa de una investigación por el pago de sobornos a funcionarios de PEMEX.
Dicho dinero se otorgó para la compra con sobreprecio de una planta de fertilizantes en el norte de México. Parte de ese dinero lo transfirió Ancira a cuentas de Odebrecht.
“Se ordena al síndico que proceda a la enajenación de los bienes y derechos (…) procurando obtener el mayor producto posible por su enajenación, a fin de hacer pago a los acreedores”, acusa la resolución judicial, publicada el jueves.
Deudas de Altos Hornos de México
Altos Hornos de México necesitaba por lo menos 900 millones de dólares de inversión debido a que requería alrededor de 350 millones de dólares para la reactivación de las operaciones del alto horno en la Planta 1.
Todas estas cantidades se suman a la deuda por más de 650 millones de dólares que tiene con PEMEX, la Comisión Federal de Electricidad (CFE), así como con sus acreedores y empleados.
Alonso Ancira Elizondo solo pasó dos meses en prisión, luego de pactar su libertad con el gobierno del expresidente Andrés Manuel López Obrador a cambio de regresar una parte de los 275 millones de dólares que le otorgó PEMEX cuando su compañía le vendía la planta de Agronitrogenados.
Ante esto, El Economista indicó que, hasta el mes de septiembre del año en curso, Altos Hornos de México pagó 104.1 millones de dólares de la cantidad previamente referida.
Antes de la determinación judicial, la empresa había informado que mantenía conversaciones con dos potenciales inversionistas. También indicó que contaban con reuniones programadas para evaluar el estado de los activos. Esto para determinar si era viable la capitalización para la reactivación de la empresa.
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