Una fuga en Ciudad de los Deportes evidenció la mala gestión del agua en la red hidráulica de Ciudad de México. Expertos urgen captar agua pluvial y renovar infraestructura ante pérdidas masivas y escasez en otras regiones del país
Una nueva fuga de agua potable en la alcaldía Benito Juárez volvió a encender las alarmas sobre el deterioro de la infraestructura hidráulica y la gestión del agua en la Ciudad de México. El incidente ocurrió frente a la Plaza de Toros México, en la colonia Ciudad de los Deportes. Provocó caos vehicular y afectaciones a vecinos. Además, evidenció una vez más las carencias estructurales que enfrenta la capital en el manejo de este recurso vital.
La fuga alcanzó niveles críticos cuando el agua rompió el pavimento de al menos dos carriles del Eje 6 Sur. Lo que obligó a desviar a los automovilistas que venían desde el distribuidor vial San Antonio y causó severos encharcamientos. La presión del agua fue tal, que alcanzó el nivel de las banquetas e interrumpió por completo el tránsito en la zona.
Mientras brigadas de bomberos y trabajadores intentaban contener el derrame, vecinos y comerciantes denunciaron la tardía respuesta de las autoridades locales. Horas después, Secretaría de Gestión Integral del Agua (Segiagua) informó que la fuga se originó por una fractura en una línea de conducción de 12 pulgadas. Ello obligó el cierre temporal de una línea principal de 20 pulgadas para poder hacer las reparaciones necesarias. Las obras duraron más de 12 horas y provocaron el corte del suministro en las colonias Nochebuena, Ciudad de los Deportes y Nápoles.
Más allá de una tubería rota
Especialistas coinciden en que este tipo de incidentes no son aislados y reflejan una falla estructural del sistema hidráulico de la ciudad, el cual es viejo, mal mantenido y sin una estrategia integral. De acuerdo con datos del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACMEX), hoy Segiagua, alrededor del 40% del agua que circula por la red de distribución se pierde por fugas, desperdicio y robo.
Además, en cada temporada de lluvias, se desperdician más de 30 millones de litros de agua por la falta de sistemas de captación pluvial, lo que equivale a lo necesario para abastecer unas 300 mil viviendas. A esto se suma la urbanización descontrolada que ha limitado la capacidad del suelo para infiltrar agua, exacerbando los encharcamientos e inundaciones.
Especialistas proponen soluciones como habilitar más pozos de absorción, mejorar el monitoreo de la red, renovar las tuberías con tecnologías más resistentes y, sobre todo, implementar infraestructura para la captación de agua de lluvia, que podría aliviar tanto la escasez como los efectos de las tormentas.
Durante el Women’s Energy and Sustainability Summit 2025 (WESS) se discutirán los grandes retos que enfrenta México en materia hídrica, especialmente ante el cambio climático y la creciente demanda urbana.
Mientras tanto, millones de personas en el país, incluyendo más de un millón en municipios del Estado de México como Nezahualcóyotl y Ecatepec, siguen sin acceso constante a agua potable. Y aunque la reparación ya se completó, el riesgo de que el sistema colapse sigue latente.
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