El personal de la planta de Chernóbil aseguró que el aumento en la actividad nuclear no representa una amenaza
Los científicos registraron un aumento en la actividad nuclear en el reactor nuclear destruido en la planta de energía de Chernóbil, en Ucrania, desde que se cubrió en 2017, pero el alza estabilizó y no excede los estándares de seguridad.
El personal de la planta dijo que el aumento en la “densidad del flujo de neutrones”, que si es significativo podría indicar una reacción nuclear descontrolada; no representa una amenaza de tal evento según sus modelos matemáticos.
Los altos niveles de radiación y los daños implican que no es posible determinar con precisión la situación bajo el bloque destruido.
“Luego de que se impuso un nuevo confinamiento seguro que ha estado en la posición diseñada durante más de cuatro años; se observa un aumento en la densidad del flujo de neutrones”, dijeron en un comunicado científicos del Instituto para Problemas de Seguridad de Plantas de Energía Nuclear de Ucrania.
“En la actualidad, las lecturas de los sensores en todas las habitaciones tienen valores estables sin una tendencia al alza. Los niveles actuales no representan una amenaza de una reacción en cadena autosostenida”, informó la planta de Chernóbil en un comunicado distinto.
El cuarto reactor de Chernóbil, 108 kilómetros al norte de la capital Kiev, explotó en abril de 1986 durante una prueba de seguridad fallida, en el peor accidente nuclear del mundo. Se enviaron nubes de radiación por gran parte de Europa; y decenas de miles de personas se vieron obligadas a evacuar.
Los científicos dicen que el aumento en el flujo de neutrones se registró en una unidad a la que entró combustible nuclear del reactor destruido; posiblemente durante la instalación de un nuevo refugio sobre el reactor.
Asimismo, indicaron que antes de que comenzaran los trabajos de instalación del nuevo refugio a fines de 2016; el combustible se enfriaba con agua de lluvia, pero que desde entonces había desaparecido.