La aplicación de la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica (LIE) por parte de la CFE comenzó desde 2020, a pesar de que hoy se encuentra suspendida
La Comisión Federal de Electricidad (CFE) incrementó en un 362% el uso de sus termoeléctricas convencionales entre diciembre del año pasado y enero del presente; de acuerdo con cálculos de la Comisión Reguladora de Energía (CRE). Expertos ambientalistas consideran a estas plantas que emplean combustible fósil para la generación eléctrica como ‘centrales sucias’; dado su importante impacto al medio ambiente y su alto costo de operación.
La CRE registró que las termoeléctricas convencionales de la CFE sumaron 4 millones 60 mil 277 MWh de energía contratada en enero del año en curso; cifra que rebasó el aumento contabilizado en otras instalaciones de la comisión.
En febrero, la energía contratada fue de 3 millones 359 mil 508 MWh en dichas centrales, justo durante el apagón eléctrico que primordialmente perjudicó al norte de México. Por tal motivo, las termoeléctricas de combustible fósil entraron para respaldar la falta de energía. No obstante, el acontecimiento no explica el importante incremento de diciembre a enero de 2021.
Al respecto, la especialista en el sector nacional de energía, Rosanety Barrios, declaró que en CFE Suministro Básico sí es constatable la modificación en cuanto a la constitución de la energía que se adquiere.
“En enero, el rebote en términos de la demanda fue importante y metieron más termoeléctricas convencionales, su capacidad la subieron mucho y probablemente consideren que la pueden seguir subiendo, por eso el tema de la nueva ley“, indicó.
Contrarreforma energética de facto
Por otra parte, el vocero de la Plataforma México Clima y Energía, Víctor Ramírez, la aplicación de la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica (LIE) por parte de la CFE comenzó desde 2020. Así, la empresa productiva del Estado (EPE) tiene la preferencia para despachar primero sus centrales, donde se incluyen las que funcionan con combustóleo.
En este sentido, clarificó que el empleo de estas termoeléctricas convencionales de la CFE es en detrimento de la población mexicana en muchos aspectos.
“Se tiene un costo de generación más alto. Usar más las termoeléctricas significa pagar más. Como buena parte son combustóleo, no todas son duales; el costo del combustóleo también es al medio ambiente y el daño a la salud“, señaló el especialista en el sector eléctrico.
Cabe señalar que, la reforma a la LIE dictamina que el orden del despacho eléctrico antepone a las centrales de la CFE a las de la generación renovable. Sin embargo, esta reforma que entro en vigor en marzo pasado, hoy se encuentra suspendida por una orden judicial.
En el país, el 24.7% de las centrales eléctricas emplean diésel, combustóleo y carbón.
Con información de reforma.com
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