Ciudad de México (Fabiola Galindo / Energía Hoy).- El presidente del Instituto Mexicano de Ciudades Inteligentes Sostenibles y Sustentables (IMCISS), Pablo Colás Murillo, aseguró que nuestro país se puede convertir en una riqueza maravillosa con una retransformación hacia la sustentabilidad, sin embargo, no somos un país que esté totalmente educado para el proceso.
Las ciudades inteligentes, ayudarán en el desarrollo económico y social, con el fin de integrar un plan de acción que contribuya a la calidad de vida de quienes habitan dichas ciudades. Los principales objetivos son: crear buena movilidad, condición urbana, certificación de ciudades y unión colaborativa.
Dichas ciudades están orientadas a mejorar el confort de los ciudadanos, siendo cada vez más eficaces y brindando nuevos servicios de calidad, mientras se respetan los aspectos ambientales y el uso prudente de los recursos naturales.
En estos modelos, la tecnología de punta es una de las principales características, la energía LED es una de las principales fuentes debido a su gran funcionamiento. Cada país y sus respectivas ciudades ocupan un modelo de smart city diferente, ya que algunas buscan tecnología avanzada para tratar el tema de seguridad y otras buscan el ahorro de energía, mejorar la movilidad y conectividad.
Las smart cities o ciudades inteligentes, buscan abrir campo al sector privado, que todos los involucrados en temas de economía, energía, telecomunicaciones, tecnología, entre otros, se abran campo dentro de estos nuevos modelos, ya que es un gran mercado, sin embargo, hay mucho que trabajar, en cuanto a la Ciudad de México.
“Si tomamos la decisión, habrá mucho trabajo, al igual que en términos de condición humana, algo también muy importante para que podamos crear esta cultura, crear la red global inteligente, para operar el planeta con altos niveles de eficiencia en cuanto a temas de desarrollo. Ya tenemos que estar comparados con otros países.”
El especialista habló sobre el proyecto de ciudades inteligentes basándose en su filosofía de diseñar mecanismos que ayuden a preservar los recursos sociales, naturales y económicos de las ciudades de México.
El concepto de ciudades inteligentes viene del 2014, desarrollado por los países nórdicos de Europa, con el fin de lograr una alta sustentabilidad y sostenibilidad.
Dijo que en términos de condición urbana, se debe tener un análisis mucho muy claro, no sólo de datos, sino de la información que estos nos generan y el análisis de los mismos, para poder actuar y tomar decisiones sobre las ciudades. Es por ello que para poder llegar a esto debe existir una unión colaborativa ciudadana, siempre y cuando el gobierno tenga la convicción y convencimiento de crear dichas ciudades.
En la Ciudad de México, desconocemos el inventario urbano, ya que el INEGI tiene información estadística, sin embargo, no se dice cuántos edificios hay y de qué tipo son, así como cuántas casas se tienen y de estas qué sostenibilidad, sustentabilidad e interoperabilidad se puede proporcionar y lograr en las distintas infraestructuras.
Colás Murillo dijo que se debe de dar prioridad a los aspectos económicos, los cuales deben estar ligados con la sustentabilidad y sostenibilidad, ya que hay algunas corrientes que les gusta la tecnología en la ciudad, la cual al fin de cuentas es para los seres humanos, por lo que el principio del proyecto debe ser 100% humanista.
Destacó la importancia de que en México ya se están creando normas estables para ciudades inteligentes, las cuales ya están teniendo los primeros avances para que haya una regla y empiece a trabajar el país en esto.
Y, que las redes de comunicaciones, utilizadas como herramientas de diseño y arquitectura de una estructura de comunicaciones adecuada, serán un gran aporte para su creación, debido a que muchos de sus beneficios de sostenibilidad y sustentabilidad van a ser a través de tecnología en favor de la sobrevivencia humana.
