Tras días de incertidumbre sobre su realización, se confirmó el debate presidencial entre Kamala Harris y Donald Trump para el 10 de septiembre. Esto con miras a las elecciones de Estados Unidos del próximo 5 de noviembre
En el debate presidencial no va a haber público, los micrófonos se van a apagar cuando los candidatos no tengan la palabra. Tampoco va a haber notas escritas, de acuerdo con las reglas que compartió ABC News, la cadena anfitriona del evento.
Los parámetros son en esencia los mismos que los del debate presidencial el pasado junio entre Trump y el presidente Joe Biden. En dicho evento, el desempeño del mandatario fue el comienzo de lo que a la postre significaría su renuncia en busca de la reelección.
Hasta el momento es el único debate presidencial confirmado entre Harris y Trump, lo que significa que es posiblemente la única ocasión en la que se vean cara a cara, antes de las elecciones presidenciales.
El debate presidencial estuvo en peligro por los micrófonos
El principal punto de desacuerdo que ponía en duda la realización del debate fue el tema de si debían estar apagados los micrófonos de los candidatos cuando no estuvieran en posesión de la palabra.
Esto se agudizó cuando a través de redes sociales, Trump amenazó con no presentarse al debate pactado. Al respecto, el equipo de campaña de la candidata por el Partido Demócrata defendió el dejar los micrófonos encendidos en todo momento, permitiendo los diálogos entre los candidatos.
Por su parte, el vocero de Harris, Ian Sams aseguró que es interesante que quienes cuidan de Trump, sigan insistiendo en apagarle el micrófono a pesar de que el candidato por el Partido Republicano mismo ha dicho lo contrario.
Respecto a las encuestas, Kamala Harris aventaja a Donald Trump con el 45% por el 41%, según una encuesta de Reuters/Ipsos. Esto demuestra que la vicepresidenta está despertando entusiasmo entre los votantes.
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